LETRAS DE UN MES GÉLIDO, LA LEJANÍA.

A mi amada:

Estas letras de mes gélido irán siempre dirigidas a ti, como todos los meses del año garabateados en mi calendario al recordarte.

Desearía de corazón, que al leer esta carta tu ser se empape de mi amor y puedas sentir paz al leerla, necesito que sientas todo lo que te deseo contar.

Caminando por las calles del pueblo en la noche, observo estas llenas de luces y colores, anuncian que ya viene la Navidad. Este mes es algo diferente, quizás diría también con algo de esperanza, me mantengo apacible. Aún no sé si será esta la época de poder verte, pero eso en nuestro amor no es lo más importante, sabes que esperaré todo el tiempo que sea necesario para poder abrazarte y decirte frases llenas de amor.

Te llevo en mi corazón, corazón colmado de ti. Podría recorrer el mundo entero, pero siempre estaría a ti unido, como alma llevada por el viento, pues mi mundo eres tú, solamente tú.

Este mes será un poco triste, pues no estás aquí físicamente. He de decirte que tú siempre vives en mí, en mi respiración, en mi cama, en mis besos, eres mi amor, tú y siempre tú. La Navidad me trae esperanza, ojala pueda abrazarte, sentirte, acariciarte,  pero no quiero intranquilizarte con mis devaneos.

Estas letras de mes gélido son para ti, mi amor. Recíbelas con un suave aroma a clavel, que es lo que inunda en estos momentos todo mi ser. Pronto estará presente la Navidad, ya puedo pensar en milagros, ya puedo soñarte, no estaría nada mal soñar  en nuestro encuentro amor. Me quedaré mudo esperando tu respuesta,  sé que tú sientes lo mismo  que yo siento. ¡Qué bello es nuestro amor, amor de diciembre, amor para siempre!

Desde nuestro rincón para ti.                       

Tu eterno caballero.

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